Clase y comunidad obrera: cultura, experiencia, lucha de clases y política en América Latina
Gerardo Necoechea Gracia*
Gonzalo Pérez Álvarez**
Rodolfo Porrini***
Este dossier, publicado en la prestigiosa Revista Testimonios de la Asociación de Historia Oral de la República Argentina, convocó a la presentación de artículos que reflexionasen acerca de las diversas características del mundo de lxs trabajadorxs en América Latina. Quiénes invitamos a dicha iniciativa, registrábamos que existía un renovado interés en entender los procesos que constituyeron a la clase y a las comunidades obreras en diversos períodos históricos y distintas territorialidades de nuestra región. En ese marco también se avanzaba en analizar las transformaciones en las condiciones de trabajo que les fueron impuestas a lxs obrerxs lo largo de un amplio periodo histórico y las organizaciones colectivas y luchas que ellxs desarrollaron para resistir a dichas dinámicas.
Han sido muchas las investigaciones que vienen recogiendo la riqueza de la historia social clásica, construyendo valiosas aproximaciones acerca de la cultura, la experiencia, la lucha de clases y la política en las clases y comunidades obreras que se constituyeron en América Latina. Esos aportes claves están siendo revisitados, criticados, complementados o discutidos desde otras perspectivas, construidas a partir de las miradas defendidas por la historia oral, la historia reciente y los enfoques de género, que han avanzado en evidenciar los fértiles entrecruzamientos de las nociones de clase, género, generación, memoria y política.
En forma particular este Dossier demuestra que para conocer en mayor profundidad las complejas articulaciones de la clase y las comunidades obreras sigue siendo clave la contribución específica que realiza la historia oral. Retomar las voces de lxs trabajadorxs a partir de diversos afluentes, implica sumar elementos fundamentales en pos de conocer otras dimensiones de las experiencias y subjetividades obreras en los diferentes procesos históricos que aquí se analizan.
Desde dicha especificidad se agrupa aquí un conjunto de investigaciones que abordan variados aspectos de la vida cotidiana de estas comunidades y fracciones de clase obrera, como sus condiciones de trabajo, sus trayectorias biográficas, la importancia de la salubridad y la medicina del trabajo, los vínculos entre estudiantes y obrerxs, sus dinámicas barriales, los formatos de comunidad que construyeron, la estructuración de sus familias, los usos de su “tiempo libre”, su acción política, entre otros.
El Dossier presenta investigaciones que abordan temas variados en territorios y periodos disímiles. La metodología de la historia oral es el eje que homogeneiza y evidencia una perspectiva común: aquella que permite a lxs autorxs peinar a contrapelo la historia tradicional, problematizar las categorizaciones académicas convencionales y dar cuenta de las visiones que lxs obrerxs han construido acerca de sus propias experiencias.
La primera contribución se titula La trayectoria de Rafael Clavero: una aproximación a la intervención sindical y política de los dirigentes del SITRAC a principios de los 70, autoría de José Barraza. Desde un enfoque biográfico el autor reconstruye un recorrido sindical y político que podría aparecer como personal, pero que en verdad revela elementos fundamentales del proceso colectivo que la clase obrera estaba vivenciando en esos años de la Córdoba (Argentina) insurrecta. A partir de una experiencia particular de politización en el seno de un sindicato clasista, se hacen observables aspectos del proceso de radicalización y combatividad que estas fracciones de la clase obrera protagonizaban.
Desde la perspectiva de la historia oral, y retomando especialmente aportes teóricos de Portelli y Dosse, la voz del obrero en clave introspectiva revisa los recorridos que llevaron a esxs trabajadorxs a construir nuevos formatos organizativos y a luchar por sus organizaciones y derechos. Desde allí se consigue complejizar un tema ya abordado por la historiografía del movimiento obrero en Argentina, haciendo hincapié en los procesos de subjetivación y politización impulsados “a ras de suelo”.
En Solidaridades obreras en narraciones estudiantiles (Córdoba, 1966-1969), de Juan Ignacio González, la modulación es diferente aunque se trate de un período semejante en el mismo territorio antes abordado. Aquí el autor revisa diversas narraciones, abordadas en tanto fuentes orales, de estudiantes que fueron parte de la profundización de acciones disruptivas desde la Universidad Nacional de Córdoba en el contexto de la dictadura que había comenzado en el año 1966 y se extendió hasta 1973.
Se analiza cómo se transformaron las formas y prácticas militantes del estudiantado, llevando su accionar hacia las calles y construyendo allí estrechas relaciones de solidaridad con los trabajadores cordobeses. Fundaron así otros “modos de ser”, relevados a partir del estudio del territorio y sus intervenciones en el mismo, y desde la observación de las modificaciones en la vida cotidiana de las barriadas, que iba conformando un nuevo entramado de sujetos, debates y acciones, profundizando la combatividad hasta llegar a grandes jornadas de lucha obrera-estudiantil, como las del Cordobazo.
El artículo Memorias de la represión. Imágenes, representaciones y discursos en torno a la huelga minera de Hipasam de 1975, de Natalí Narváez, explora los modos a través de los cuáles se construyeron las conmemoraciones de estos conflictos sociales en la mina de hierro ubicada en Sierra Grande, al sur de la provincia patagónica de Río Negro (Argentina).
Se trata de una huelga que transcurrió en el complejo contexto político argentino de 1975, con una represión que comenzó en ese año y se extendió a la posterior dictadura (iniciada en 1976), contando con la complicidad de la dirección nacional del sindicato minero que debería haber representado a esxs trabajadorxs en lucha. La revisión de los testimonios, recogidos por la propia autora, revisa cómo se construyeron los discursos de la represión, del disciplinamiento político y la vida cotidiana, y la legitimación del accionar militar durante y contra la huelga.
Se analizan los mecanismos discursivos que operaron en la conformación de diversas memorias, algunas de ellas justificadoras de la represión y con claras referencias hacia las situaciones que en ese mismo territorio se vivencian en el presente. En ese permanente diálogo entre tiempo pretérito y coyuntura actual este artículo contribuye a poner en primer plano la clásica concatenación de pasado, presente y proyección de futuro, articuladora clave de una visión de la historia como herramienta de complejización política y transformación social.
Cierra estos primeros cuatro aportes del Dossier, todos concentrados en los años ‘60s y ‘70s de Argentina, la contribución de Maximiliano Ríos, titulada ‘Más productivo que proletarizarse’. Historia oral de un médico de izquierda en su rol como profesional y militante en argentina durante los 60/70s. A partir de un conjunto de entrevistas a un médico especialista en medicina preventiva del trabajo e integrante del Partido Revolucionario de los Trabajadores, se explora la dinámica de construcción de sus memorias. El mismo se ubica inicialmente en la ciudad de Córdoba y luego en la provincia de Buenos Aires.
El entrevistado revisa su actuación como militante político y profesional de la salud, articulando ambos aspectos y construyendo una narrativa homogénea que presenta a su recorrido como lineal y sin contradicciones. Sin embargo, el autor complejiza esa lectura, evidenciando cómo esa memoria se conforma a partir de un entramado de recuerdos y olvidos, de mitos, de transfiguraciones de fechas y procesos históricos, que abonan esa línea histórica que no presentaría conflictos ni quiebres en relación a su identidad. Lo que se hace observable, lejos de pensar en que estamos hablando de “mentiras” o “errores”, es cómo la memoria se conforma en tanto un activo y complejo proceso de creación de significados.
Además, este aporte explora la relevancia de la medicina del trabajo, en tanto espacio para interpelar los procesos de politización y subjetivación de lxs obrerxs, en especial a partir de poner en cuestión que sus cuerpos sean comprendidos como una mera mercancía más en función de la acumulación de capital. Ese rol específico es lo que el entrevistado destaca como una contribución más relevante que la de “proletarizarse”, poniendo en debate algunas de las prácticas propias de las organizaciones revolucionarias de esa etapa.
Los dos últimos artículos cambian el foco de aproximación hacia el norte de nuestra América Latina, observando dinámicas sociales desarrolladas en México. En Subjetivación política y conformación de conciencia de clase. El caso de la Sociedad Cooperativa Trabajadores de Pascual (1982-1985), Diego Bautista Páez estudia los orígenes de esa organización, conformada tras una importante huelga durante casi mil días de la década del ’80 en la Ciudad de México.
Desde enfoques anclados en la historia social inglesa, y recuperando especialmente a E. P. Thompson, el artículo analiza doce entrevistas a trabajadores, que además eran parte del Partido Mexicano de los Trabajadores. Se explora la experiencia que vivenciaron, atravesando procesos traumáticos (como el asesinato de dos compañeros de lucha), y la dinámica de subjetivación política que protagonizaron a partir del proceso de antagonismo contra el patrón de la empresa.
La profunda revisión de la huelga y del posterior proceso de conformación de la cooperativa, le permite al autor repensar la dinámica de conformación de la conciencia de clase. Conceptualiza a la misma según cuatro formas de experiencia, basadas en la ruptura que durante la huelga se produjo entre subordinación y antagonismo, pasando del consentimiento y la aceptación de la dominación al abierto desacato contra las reglas establecidas y la autoridad del dominador sobre sus cuerpos.
Cierra el dossier la mirada que se aparta más en términos temporales, aunque no lo hace en clave temática ni en las preocupaciones que evidencia. Anagricel Camacho Bueno, en ‘A lomo de peón’. Historia social de los trabajadores de la siderometalúrgica La Consolidada, México (1934-1964), dibuja la trayectoria de la empresa desde 1907 hasta su desaparición en 1964. Es interesante el contraste con el aporte de Bautista Paéz, porque ahí donde los trabajadores de Pascual lograron crear una cooperativa y mantener su fuente de empleo, los trabajadores de La Consolidada sintieron que la realidad los aplastó cuando la empresa cerró. Para ellos quedó la nostalgia de aquellos mejores tiempos, en particular los años de efervescencia sindical durante la década de 1930, cuando se fundó el Sindicato Industrial Minero Metalúrgico, la consolidación de una sociabilidad obrera, el vaivén entre conflicto y armonía en la relación con la empresa y finalmente la huelga de 1944. El periodo inmediato posterior atestiguó el final de un periodo “bonito”, en el decir de un obrero. Las transformaciones que siguieron configuraron el mundo que enfrentaron los trabajadores de Pascual.
La investigación de Camacho Bueno recupera aportes de carácter testimonial y utiliza un amplio conjunto de fuentes (fotografías, memorias obreras sintetizadas en escritos, entrevistas de otros autores, cartas, documentos oficiales, etc.) que describen cómo la empresa se relacionaba con sus obreros, buscando construir una subjetividad que no pusiera nunca en cuestión su rol subordinado y heterónomo. La autora analiza la disputa por la autonomía operaria, observando cómo la misma se desarrolla a partir de diversas acciones en las cuáles tiene un rol central la conformación de herramientas propias de la vida y la cultura obrera.
***
Los seis artículos abordan problemas centrales acerca de la investigación realizada con la metodología propia de la historia oral, además de los problemas igualmente centrales y propios de la historia de lxs trabajadorxs. En primer lugar, cada uno de los textos ensaya maneras distintas y fructíferas de abordar el problema de cómo relacionar el relato individual con la experiencia y la memoria colectiva. En segundo lugar, los textos proponen distintas maneras de analizar las entrevistas de historia oral, teniendo en cuenta el entrelazamiento de la percepción en la experiencia vivida y la reflexión en la experiencia recordada. Por último, muestran las posibilidades de entretejer las fuentes orales con otras fuentes, para elaborar tanto los contextos inmediatos a la acción descrita como la situación histórica que enmarca y condiciona las posibilidades de acción y comprensión de las que los testimonios dan cuenta.
Creemos que las diversas producciones incorporadas en este Dossier, proporcionan herramientas de interés para indagar en las distintas formas, contenidos y características de la conflictividad, las identidades construidas y las experiencias vivenciadas por clases, fracciones de clases y comunidades obreras. Se trata de un conjunto de artículos que, a contramano de cierta escritura historiográfica que elude la clarificación conceptual, explícitamente formula sus propuestas teóricas y aportes, en especial en torno a la utilización de insumos propios de la historia oral. El adecuado y complejizado uso de estas fuentes, sigue demostrando que el abordaje de los testimonios obreros aún tiene mucho para aportarnos acerca de los procesos de subjetivación política de lxs trabajadorxs.